InterVap, pionero en las terapias alternativas como la haloterapia (inhalación de salmuera o solución salina), se ha especializado en la construcción de cabinas o grutas de sal.

Las cabinas o grutas de sal se construyen con materiales 100% naturales y ricos en minerales. La sal se proyecta sobre las paredes, previamente elaboradas, para soportar la adhesión de sal granulada, con una capa de sal entre 1,5 y 3 cm de espesor.

El techo de la gruta también puede ser tematizado de la misma forma, creando irregularidades estructurales y, así, simular estalactitas o entradas de luz artificial y natural. Con el bloque de sal del Himalaya, habitualmente de un tono rosado, se pueden hacer espectaculares diseños en las paredes, y retro iluminarlos con tiras de led. Todo esto crea un entorno muy agradable, que presta a relajarse en estos espacios, y de esa forma, favorecer una estancia altamente saludable. El suelo puede ir relleno de sal de una mayor granulometría esparcido por todo el habitáculo formando una superficie similar a la playa, pero con sal.

Las sales que se utilizan son de diferentes composiciones, dado que los minerales que se encuentran en la sal de mina no son los mismos que se pueden encontrar en la sal de mar. La combinación de ambas sales hace que la haloterapia sea aplicable para un extenso grupo de usuarios y patologías.

La proyección de sal se puede generalizar o, incluso por medio de generadores de ambiente salino, individualizar o personalizar, dependiendo de los tratamientos que se quieran ofrecer a nivel terapéutico.

Los proyectores de ultrasonidos son la última tendencia en difundir y ambientar las grutas con una solución húmeda que se proyecta en la gruta. La sal dispersa en ultrasonidos forma unas macromoléculas o partículas sumamente finas que la piel absorbe con más facilidad, especialmente en tratamientos de psoriasis u otras afecciones cutáneas. La inhalación de esta salmuera dispersa por ultrasonidos tiene mejor absorción también por las vías respiratorias, dado que no reseca las mucosas (análisis llevados a cabo por la asociación médicos de bronquios alemana: Lungenärzte über Rauminhalation mit einer Solevernebelung). Este generador de sal permite elaborar y combinar soluciones salinas en disolución, y adaptarla a la necesidad específica de cada tratamiento.

En cambio, los generadores de sal seca son equipos diferentes a los anteriores, ya que crean un ambiente salino en forma de polvo seco, si bien ambos logran saturar el ambiente hasta los 29 mg/m3, dependiendo del volumen de la estancia. Este ambiente seco es más fácil de programar a través de la pantalla digital, que permite ajustar de forma exacta el volumen de la estancia y mediante 6 programas diferentes ajusta la suspensión salina en el ambiente entre 0,5-29 mg/m3. La proyección a través de un ventilador, que lleva una iluminación azul, permite visualizar la nube de las macropartículas que son dispersadas al ambiente. Estos generadores también pueden utilizarse con sales de diferentes composiciones y mineralizaciones, siempre que la sal no tenga una granulometría superior a 0,3 mm/3.

Las ventajas curativas de la sal

La sal del Himalaya es la más pura del planeta. Más de 500 millones de años sin adulterar ni refinar. Las cuevas se construyen con este tipo de sal, sin ningún aditivo y puramente cristalina. Este ambiente salino tiene la particularidad de destruir todo tipo de microbios que sean nocivos para el organismo dejando las bacterias necesarias que necesitamos para nuestra salud. Todo ser humano convive durante toda su vida con una serie de bacterias que contribuyen a su bienestar. Una vez que las defensas inmunológicas se ven en un estado de indefensión, es cuando las bacterias invaden nuestro organismo y crean un alto riesgo de infecciones de todos los tipos.

René Quinton fue un médico que sanó a millares de tuberculosos inyectando solución salina a través de la vía sanguínea. Este médico llegó a ser censurado por los intereses de las grandes farmacéuticas que preferían matar las bacterias a grande escala por medio de los antibióticos. La alcalinización del cuerpo humano, a través de bicarbonato sódico y el cloruro de magnesio, ha demostrado ser durante muchos años una de las terapias más efectivas para sanación de cánceres y tumores.